Un artículo de la revista Law Practice aborda, de una forma sencilla y clara, uno de los asuntos de moda en la gestión de despachos: el branding. Cómo me ha parecido muy interesante me he hecho un resumen traducido al castellano y lo he estructurado en torno a las 6 aportaciones que más me han gustado y que comparto con vosotros. Espero que, como a mí, también os sirva para reflexionar.
1.- ¿Qué es el branding?
Todas las empresas tienen una marca y es el conjunto de percepciones que la gente tiene cuando oye el nombre de la empresa o ve su logo. Llamamos branding a las acciones que tratan de influir en esas percepciones.
Una marca es una promesa, y en el contexto de los servicios legales, es una proposición de valor específica. Desafortunadamente, las percepciones que tienen los clientes de la mayoría de despachos de abogados no se diferencian mucho unas de otras.
2.- Diferenciación
La mayoría de las firmas están desarrollando la marca con objetivos de reconocimiento. Se centran principalmente en ser conocidos por cuantas más personas mejor, pero sin intentar alcanzar un target específico.
Sólo un número pequeño de firmas tienen la condición de ser líderes en su campo. Sólo hay un puñado de firmas con marcas fuertes.
3.- Autenticidad
Se necesita encontrar la forma de expresar quien eres realmente. No puedes decirle al mercado que eres el mejor abogado en una especialidad si no lo eres.
Las empresas caen en la trampa de expresar a través de sus marcas cosas que les preocupan a ellas, pero no a través de aquello que preocupa a sus clientes. A tus clientes no les importa cuantos años tiene tu empresa ni el número de profesionales que tiene tu plantilla. La clave para hacer branding es comunicar aquellos atributos que importan a los clientes.
4.- Bufete o Abogado
«Los bufetes tendrían que pensar más en la forma en que piensa General Mills para vender Haagen-Dazs»
Los bufetes piensan en sus marcas de la misma forma que podrían pensar en la marca Apple o IBM, pero en realidad están en una posición diferente. Los bufetes tendrían que pensar más en la forma en que piensa General Mills para vender Haagen-Dazs. Si lo hicieran de esta forma y sus esfuerzos de marketing se centraran en sus helados – sus profesionales – tendrían un éxito mucho mayor.
La tecnología también juega un papel importante. Cada vez más se ofrecen los servicios a través de plataformas tecnológicas que hacen decrecer la dependencia de los profesionales, por lo que adquiere más importancia la marca de la firma.
5.- Marketing de contenidos
El marketing de contenidos es una forma, no solo de poner de manifiesto la marca, sino también de ofrecer una muestra de su trabajo. Los contenidos son el eslabón entre la promesa de la marca y el servicio ofrecido por el abogado.
6.- Emociones
Una lección que hay que aprender de las marcas de consumo es que los bufetes pueden poner un mayor énfasis en las emociones, incluso en el “sex appeal” en sus menajes. Incluso empresas como IBM, mediante la creatividad de su publicidad, hacen que luzcan más seductoras y diferentes.
«Las personas solo conectan emocionalmente con aquellos contenidos que le transmiten emoción”
Habría que dotar de mayor personalidad y energía los contenidos que ahora son extremadamente aburridos y técnicos. Las personas solo conectan emocionalmente con aquellos contenidos que le transmiten emoción